El otro día leía un artículo sobre la gran burbuja profesional que se ha creado en torno a la figura del community manager y quiero compartir una breve reflexión al respecto. Cierto es que el boom del social media ha supuesto una gran oportunidad para empresas e incluso para profesionales independientes, ya que ha puesto al alcance de todos un canal comunicativo con unas posibilidades extraordinarias que permiten soñar con objetivos hasta hace unos años inimaginables.
El gran requerimiento de profesionales especializados en el medio online, unido a los índices históricos de paro que vive nuestro país, ha hecho que la figura del community manager se haya extendido a todo aquel que sabe manejarse en Facebook, tiene un cuenta de Twitter, gestiona su perfil en Youtube o comparte su vida por Instagram. Según los datos, el 60% de los parados sueñan c
on redigirir su carrera hacia esta profesión, que según bien afirma el Presidente de AERCO-PSM José Antonio Gallego, "está generando cierto cansancio", entre otras cosas, por la masiva entrada de profesionales no cualificados.
El community manager es aquella figura que gestiona comunidades online, aquella persona que se encarga de comunicar en nombre de una empresa o marca con sus clientes o potenciales clientes, y que es "la viva voz" de la marca en las redes que está presente. La necesidad de conocimientos (cuanto menos básicos) de comunicación, marketing, RRPP o diseño e implementación de estrategias, por ejemplo, es bajo mi opinión una de las premisas básicas que se les deben pedir a aquellas personas que van a encargarse de la comunicación online de nuestra empresa.
Al igual que muchos profesionales del periodismo han puesto la voz en el cielo (con tanta razón) del intrusismo que sufren en su profesión, la figura del community manager está posicionando al profesional del social media en una escala nada favorable para los que realmente saben lo que hacen y están realmente cualificados para ello. Precisamente porque es un perfil relativamente nuevo, la imagen de este profesional debe posicionarse dentro de unos parámetros de alta calidad y de gran peso dentro de la empresa.
¿Están las empresas concienciadas de lo que significa dejar en las manos de cualquiera la comunicación de su marca o empresa?
Imagen: albertoaranda.net
Una historia impresionante de mal Comunity Manager y mala reputación en la red se dio hace cosa de un mes en twitter. Aquí esta la historia contada por uno de sus protagonistas: http://elblogdelospajarospican.blogspot.com.es/2012/11/amaiamontero-e-ifilosofia-la-increible.html
ResponderEliminarMuy interesante y una pena que este tipo de "profesionales" sean vinculados al mundo del community management, porque reitero, no hacen más que minusvalidar a profesionales de verdad. Un claro ejemplo, este. Gracias ;)
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